Anuncio o advertencia. Que va a suceder muy pronto, de un momento a otro. Hay muchas formas de anunciar o advertir a la ciudadanía sobre sucesos que están pronto a suceder. También en la Biblia tenemos diversas formas en que Dios utilizó a sus mensajeros para advertir al pueblo de su decadencia o sus juicios por el mal comportamiento de ellos.
Aviso inminente
“El temor de Jehová es limpio, que permanece para siempre; los juicios de Jehová son verdad, todos justos. Deseables son más que el oro, y más que mucho oro afinado; y dulces más que miel, y que la que destila del panal. Tu siervo es además amonestado con ellos; en guardarlos hay grande galardón”.
“Hijo de hombre, yo te he puesto por atalaya a la casa de Israel; oirás, pues, tú la palabra de mi boca, y los amonestarás de mi parte....”
“Por tanto, velad, acordándoos que por tres años, de noche y de día, no he cesado de amonestar con lágrimas a cada uno”.
“Pero siendo avisados por revelación en sueños que no volviesen a Herodes, regresaron a su tierra por otro camino”.
“Pero oyendo que Arquelao reinaba en Judea en lugar de herodes su padre, tuvo temor de ir allá; pero avisado por revelación en sueños, se fue a la región de Galilea”.
“Ellos dijeron: Cornelio el centurión varón justo y temeroso de Dios, y que tiene buen testimonio en toda la nación de los judíos, ha recibido instrucciones de un santo ángel, de hacerte venir a su casa para oír tus palabras”.
“Por la fe Noé, cuando fue advertido por Dios acerca de cosas que aún no se veían, con temor preparó el arca en que su casa se salvase; y por esa fe condenó al mundo, y fue hecho heredero de la justicia que viene por la fe”.